Hasta la publicación ayer de los resultados obtenidos por
Catalunyacaixa en 2013, no teníamos más datos que los ofrecidos en el cierre
hasta septiembre. Estos, arrojaban un resultado positivo de 187,3M€, cuyo
principal protagonista era la aportación de 470,6M€ provenientes del canje de híbridos,
el denominado “burden sharing”. Un efecto que era omitido explícitamente en la
nota adjunta explicativa de dichos resultados presentada en su momento en la
CNMV.
Con estos datos, no hace
falta ser un lince para constatar que sin el “burden sharing”, el resultado hubiese
sido de una pérdida de 283,3M€ que, evidentemente, podrían verse modificados en
función del nivel de dotaciones realizadas hasta entonces, unos 377,4M€.
En conjunto, la comunicación de dichos resultados, se acompañaba
de una prosa publicitaria llena de halagos y jolgorios varios por la magnífica
situación y recuperación de la entidad de cara a afrontar retos futuros. En
definitiva, una especie de hoguera de las vanidades aderezada con cierto
regusto al paroxismo propio de las convenciones anuales de vendedores de Avón:
nuevas etapas, llenas de recuperación y expectativas.
Ayer, por fin, con la publicación del resultado del 2013, era el
momento de confirmar, o no, tales augurios. Así que ávidos de saber, nos
dispusimos a leer la nota de prensa publicada en la CNMV, única información
disponible por el momento de dicho cierre de ejercicio.
La agregación de conceptos en la contabilidad, puede ser en
ocasiones, lo que las prótesis mamarias en la cirugía estética. Con justificación,
criterio y prudencia, mejoran, facilitan y permiten un análisis acertado y
eficaz. En exceso, pueden convertirse en una farsa grosera y de perversos
resultados. Y viendo el detalle de la cuenta de resultados presentada ayer, nos
tememos que algún cirujano contable de Beverly Hills ha colaborado en su
elaboración.
Así, como quien no quiere la cosa, han considerado de forma
agregada el impacto del “burden sharing”, los activos fiscales y las
provisiones, arrojando un beneficio conjunto de 364,4M€. que, sumados a los 167,8M€
de margen de explotación, incrementan el resultado final hasta los 532,2M€.
¿Y ya está? … pues no, evidentemente, salvo que uno se sienta a
gusto invadido por un profundo olor a chamusquina, además de ojiplático por tal
homenaje a los juegos de manos. Más aún, cuando por mucho que se rebusque en la
nota de prensa, no se ofrece ningún dato concreto que permita aislar el impacto
real de cada uno de los conceptos que engloban los mencionados 364,4M€.
Según diversas fuentes como El
Confidencial y El
Boletin, la imputación realizada por créditos fiscales se sitúa en 2.023M€
y la correspondiente a dotaciones en -2.156M€. Si esos datos son correctos, es fácil
deducir que la aportación por “burden sharing” debería haber sido de 497M€ para
“casar” con los 364,4M€ de conceptos extraordinarios.
Si eso es así, ¿cuál es el resultado real de Catalunyacaixa en
el 2013 sin estos conceptos “extraordinarios”? ¿Sigue arrojando beneficios? O como
reza el titular de su nota de prensa ¿Realmente consolida su capacidad para
generar resultado?... positivo, debemos entender.
Pero el misterio continua, o quizás nuestra ignorancia, dado que
ni somos de Beverly Hills ni tampoco cirujanos. Leyendo el último post
publicado por nuestro admirado y respetado Hipo en su blog Exbilderberg, hemos
constatado que, como inteligentemente ha realizado su autor, tomando como
referencia, a falta de más actuales, los valores que CX imputó en su resultado a
septiembre 2013 por el “burden sharing”de 470,6M€ y los 377,4M€ en dotaciones
y trasladándolos a los presentados ayer, los créditos fiscales aplicados
deberían ascender al menos a 271,4M€, con lo que aislando estos conceptos
extraordinarios, atípicos y no recurrentes, el resultado de CX tampoco sería el
anunciado, arrojando unas pérdidas superiores a los 200M€.
No hay duda que habrá que esperar a disponer de una información
más amplia con el detalle e información contable de la cuenta de resultados de
esta entidad en el 2013 –lo haremos expectantes-, pero tampoco hay duda que echar
mano de tanto acicalamiento y Photoshop en la presentación de unos resultados,
no es nada honesto e induce a todo tipo de sospechas.
Nos parece muy inquietante un incremento tan elevado en tan solo
un trimestre de los importes correspondientes al “burden sharing”, créditos
fiscales y dotaciones, como los que reflejan los publicados en prensa ayer comparados
con los publicados en la nota de prensa de presentación de resultados de CX a
septiembre 2013. Aunque más inquietante nos parecerá si hemos acertado y la
dosificación realizada de alguno de estos conceptos se ha realizado más a
fuerza de conveniencia, que de realidad o prudencia.
Da la sensación que en esto de “vender” resultados, sigue
imperando la práctica de anunciar como plazo fijo, seguro y sin riesgos, lo que
es incierto, variable y no disponible realmente.
¿Alguien puede "desinquietarnos", por favor?